Un
dato importante a tener siempre en cuenta es que a las iguanas, se
las debe manipular con precaución, pues si se las toma de la
cola, ellas la sueltan al igual que la lagartijas y, aunque después
les vuelva a crecer, ésta será más corta y se les puede
infectar cuando está recién cortada. En este caso, hay que
limpiarles el resto de cola con abundante agua, oxigenada y
alcohol yodado para desinfectar.
Las
iguanas cambian la piel constantemente; el tiempo que transcurra
entre cada muda, dependerá de la comida, el estrés de la iguana,
el terrario y otra serie de factores.
No es necesario sacarles la piel cuando esta se está cayendo,
pero sí puedes ayudarle sacándole los pequeños trocitos de piel
que les quedan en la cara, es decir, los trocitos que le quedan
alrededor del tímpano, ojos, lápida sub-timpánica, orificios
nasales, papada y boca con mucho cuidado de no lastimarlas.
Algunas
personas acostumbran bañar a las iguanas, acto que debe tener
algunos cuidados: el agua debe estar tibia y no fría ni
hirviendo; si el agua tiene un alto contenido de cloro, es mejor
no bañarlas o agregarle unos minutos antes al agua unas pastillas
anticloro que son usadas para desclorar el agua de los acuarios de
peces. Las iguanas en estado silvestre nadan en pequeños arroyos
y ríos, así que esta acción no les afecta para nada. Además a
algunas iguanas les gusta defecar dentro del agua.
Las
iguanas verdes (Iguana iguana) viven en estado silvestre en los
bosques tropicales desde el norte de México hasta Perú y el sur
de Brasil, en países e islas que presenten una humedad y
temperatura elevada. Las iguanas viven en las montañas, sobre los
árboles a una altura de unos 15 ó 30 metros, alcanzando los
rayos solares que necesitan para mantener su calor interno, ya que
ellas son ectopoiquilotermas, es decir, el calor para su
metabolismo interno lo reciben del medio y no lo producen ellas.
Pasan el día escalando las ramas y tomando sol en sectores
cercanos al agua. Su color verde brillante les ayuda a protegerse
contra depredadores entre los vegetales los cuales come: hojas,
flores y frutas. Las iguanas más viejas viven más alto en los
árboles donde hay más luz y es más seco, en cambio las iguanas
jóvenes viven más cerca del suelo, ya que requieren de un
ambiente con una humedad mayor.
Las
iguanas no se encuentran en estado de extinción en ninguna parte
del mundo. Además, la mayoría de las mascoterías (por no decir
todas) vende iguanas nacidas y criadas en criaderos para este fin
y no son sacadas de las selvas húmedas. En Centroamérica es muy
común encontrar estas granjas de iguanas que las crían para
ventas como mascotas y para comerlas también.
El
cuidado que las iguanas requieren, es mayor que el que te dirá un
vendedor de mascotas, pero no mucho mayor. Además debes
considerar que con las iguanas se gasta mucho dinero, en
terrarios, visitas al médico veterinario, calefacción, etc. y
mucho tiempo, en preparar la comida, domesticando a la iguana,
sacándola al sol, etc.
En
caso de enfermedad, no
es recomendable confiar solo en un vendedor de mascotas. Ellos
(generalmente), sólo necesitan mantener a los animales vivos el
suficiente tiempo para venderlos. En
éstos casos, o ante cualquier problema con las iguanas, hay que
llevarlas inmediatamente a un veterinario, ( en lo posible,
especializado en reptiles).
|